Wednesday, February 26, 2014

Angora: Un asunto peliagudo


Sucede en contadas ocasiones que un vídeo de PETA que no haga alusión al sexo ni contenga imágenes de celebrities desnudas se difunda como la pólvora en los medios de comunicación y en las redes sociales hasta convertirse en viral. Por una vez el vídeo de la conocida organización animalista no destapaba a ninguna ex-conejita de Playboy exclamando el famoso eslogan “Antes desnuda que llevar pieles” sino la flagrante crueldad a la que son sometidos los conejos de angora en las granjas chinas. Tras visualizar las impactantes y angustiosas imágenes de conejos chillando de dolor mientras eran prácticamente despellejados vivos y hacer caso a las crecientes protestas de los consumidores, muchas firmas textiles anunciaron su decisión de no seguir adquiriendo lana de angora hasta que sus proveedores acreditaran que cumplían con las normativas de bienestar animal vigentes. Algunas compañías como ASOS iban más allá y optaban por eliminar todo rastro de angora de sus stocks. “Somos miembros de la Fur-Free Alliance of Retailers  y sabemos que la producción de lana de angora y de otros productos de pelo de conejo es cruel con los animales, por eso hemos decidido  prescindir de ellos” declaraba la compañía inglesa en su comunicado. Por su parte, un portavoz de Stella McCartney comunicaba al periódico The Telegraph: 
"Después de comprobar el trato despreciable al que son sometidos los conejos de angora hemos decidido no volver a utilizar esta lana en los productos Stella McCartney. Aunque siempre habíamos garantizado que nuestra lana de angora provenía de un proveedor “cruelty-free” italiano no queremos promover el uso de angora en la moda”.

                                      
                                  "¿Excluir la angora de nuestro guardarropa o buscar una alternativa ética?"
Partiendo de la premisa de que la obtención de productos de origen animal siempre entraña en mayor o menor medida cierta crueldad, la elaboración de la lana de angora plantea algunas dudas y dilemas éticos:


El 90% de la producción mundial de lana de angora proviene de China, país donde no existe ninguna normativa que regule el trato de los animales de granja y con una industria que no respeta muchos derechos elementales de los trabajadores.


Los conejos son a menudo confinados y aislados en pequeñas jaulas con suelo de alambre; condiciones similares en las que viven muchos animales en las granjas peleteras.
Imagen: PETA
"Prescindir de ella o pagar más para que otros sufran menos"


El pelo de los conejos hembra es más largo y de mayor calidad por lo que en muchas granjas sacrifican a los machos nada más nacer.Probablemente muchos diréis que podrían ser criados para producir carne pero a los que somos vegetarianos y/o tenemos un conejo como mascota esta alternativa no nos convence..


El crecimiento y la calidad del pelo se reduce considerablemente con los años.Los conejos de mayor edad que ya no resultan rentables suelen terminar en el matadero a menos que el criador esté también dispuesto a mantener un refugio de conejos ancianos.


Lana de angora ética - ¡Complicado pero no imposible!
Imagen: Ambika
"No podía entender porqué teníamos que torturar y matar a estos dulces animalitos pudiendo obtener lana de la misma calidad de forma humanitaria" Ambika Conroy


Tirando del hilo descubrimos una madriguera de conejitos felices en Nueva York gracias a Ambika Conroy, una diseñadora amante de los animales que desde hace siete años se dedica a criar con mimo a estos peludos orejudos y a producir de forma humanitaria y totalmente artesanal prendas de angora. El pelo de los conejos se recolecta respetando el periodo natural de muda mediante un sencillo cepillado.
Imagen: Ambika
Las creaciones de Ambika se realizan por encargo a través de su tienda online, donde también pueden adquirirse bikinis tejidos con algodón ecológico. Conroy complementa sus ingresos alquilando la cabaña de la granja - situada a tan sólo 2 horas del corazón de Manhattan - como alojamiento de turismo rural o vendiendo conejitos como mascota. Para quienes Nueva York no les quede muy lejos existe la posibilidad de apadrinar un conejo de Ambika y de asistir a un taller de fin de semana para aprender a hilar y tejer con la lana de su peculiar “ahijado”.
Un encantador vídeo para saber más sobre la granja de Ambika. ¡Muy recomendable para ver con los más peques de la casa!

La producción de angora ética no podrá satisfacer la actual demanda de la industria de la moda rápida pero sí la conciencia de quienes buscan "vestirse con corazón."

2 comments:

  1. Sí es un tema complicado: ¿acaso no se puede vender la carne del conejo una vez no sirve y es necesario usar su piel? No sé… es peliagudo…

    Sophie Carmo

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  2. En China hay pocas normas para casi todo. Pero yo diría que la responsabilidad es más nuestra que de los productores: demandamos prendas a un ritmo muy acelerado sin importarnos en qué circunstancias se han producido. Tendrá que producirse un cambio muy grande para que esto deje de ser así

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