¡Te encontré, LOLES!

Es 17 de marzo, domingo y en Punta Umbría hace un tiempo de perros. Esto no va a impedir que me reúna con algunos amigos y juntos disfrutemos de una apetecible paella, frente al puerto y con marisco de Huelva recién pescado. Pero dejemos de hablar de comida, que esto es un blog de moda y yo me lío, me lío y en un pis pas, os estoy explicando el postre, los cafés y la cena que sigue después.

Punta Umbría está muy tranquila estos días, engalanándose para recibir a los turistas de las futuras fiestas de Semana Santa. Pero hoy es domingo, así que hay algo más de ambiente por la Calle Ancha, una de las vías principales, y la ría, donde me encuentro con mis amigos dando un pequeño paseo post-paella. Me fijo en la gente que por aquí también va. Parece que la mayoría conoce ya el pueblo de antes y suele venir a pasar el día de forma habitual. Y es que estas cosas se notan. El turista, aunque ande desprovisto de mapas o folletos, es fácil de identificar. Este no deja de curiosear aquí y allá, sin dirigirse con pasos seguros a ningún lugar. Y como os decía, ninguna de las personas que yo estoy observando se comporta de esta forma. Seguro que no vienen de tan lejos como yo (apuesto a que pocos mañicos se verán y oirán por aquí en esta época del año).

Y entonces la veo. De ella me llaman la atención su vestido vaquero y su pañuelo. ¿Vendrá de por aquí cerca esta guapa morena, como yo estoy suponiendo? ¡Así es! Porque resulta que es sevillana, como nuestra protagonista de la semana pasada. Efectivamente, tan solo estará en Punta Umbría unas horas, para volver a su ciudad por la tarde y a su trabajo, del que más adelante deja una pequeña pista, mañana lunes. Halagada y con algo de vergüenza, accede a aparecer en esta sección con su atuendo y su bonita sonrisa.

- Perdona, ¿te puedo hacer una foto? ¿O dos o tres?

- ¡Claro!

- ¿Cuál es tu nombre?

- Loles.

- Quiero que me digas cinco cosas que así, de repente, te vengan a la cabeza. ¡Rápido!

L ocura

O bsesión

L ibertad

E nseñanza

S evilla (la ciudad, no el equipo: ¡que quede claro!)